Políticas públicas

Abordando las causas para ayudar a todos los animales posibles.

Abordar las causas

En AAP queremos ayudar a tantos animales como sea posible. Por supuesto, ayudamos a los animales necesitados acogiéndolos en nuestros centros de rescate. Pero acogerlos no es suficiente. Solo se puede prevenir realmente el sufrimiento de los animales abordando las causas de su sufrimiento.

Por ellos trabajamos en Políticas Públicas, abogando por la mejora de la legislación de bienestar animal en toda Europa. Lo hacemos trabajando desde cada país pero también a nivel europeo, ¡porque los problemas transnacionales requieren soluciones transnacionales!

Las causas para las que buscamos soluciones son:


Cómo lo hacemos

En AAP llevamos desde 1972 rescatando mamíferos exóticos de toda Europa, primero desde AAP Almere y después, desde 2013, también desde AAP Primadomus. Durante todo este tiempo hemos podido ver las carencias en las leyes y regulaciones actuales y qué consecuencias terribles han tenido para los animales pero también para la sociedad en general. AAP comparte estas certezas con técnicos y políticos responsables en cada país. Lo hacemos de diferentes maneras como por ejemplo mediante presentaciones en el Parlamento Europeo y a altos funcionarios de la UE o asesorando a grupos de trabajo en otros países de la UE que desean mejorar las leyes y regulaciones de bienestar animal.

Compartir nuestros conocimientos y experiencia persigue dar más argumentos y demostrar la necesidad urgente para una mejora de la legislación en la UE.

Qué queremos lograr

Nuestro compromiso en la consecución de mejores leyes y regulaciones está funcionando. En 2015 solo una de las Comunidades Autónomas en España había prohibido el uso de animales salvajes en Circos y hoy, gracias al trabajo hecho desde la Coalición InfoCircos, de la cual formamos parte, 11 de las 17 Comunidades Autónomas ya han prohibido los animales salvajes en circos y el 72% de la ciudadanía está de acuerdo con dicha prohibición. Además, casi todos los países de la UE tienen prohibiciones de este tipo, por ello, estamos trabajando también desde la UE, para conseguir una prohibición para toda la UE.

Por otra parte, varios países de la UE ya han logrado regular el comercio de animales de compañía exóticos a través de una Lista Positiva. Un buen comienzo, que nos gustaría extender al resto de Europa.

Preguntas frecuentes sobre políticas públicas

Es muy importante que todos los países de la UE tengan una prohibición de los animales salvajes en el entretenimiento para prevenir el sufrimiento animal y garantizar la seguridad pública. Desgraciadamente todavía hay países en la UE, como Alemania, que no han implantado la prohibición de su uso.

Que Alemania también incorpore esta prohibición a su legislación es muy importante porque la industria circense es muy fuerte allí: hay 75 circos alemanes que trabajan con más de 150 animales salvajes, y los circos europeos que todavía tienen animales salvajes también se les permite actuar en el país. Precisamente por ello la mayoría de incidentes relacionados con animales salvajes de circo han ocurrido en Alemania. Entre 1995 y 2019, se informaron de por lo menos 202 incidentes en el país, que involucraron a 437 animales salvajes de circo. Además, Alemania es un país con mucho peso en la Unión Europea de forma que si conseguimos su apoyo a la prohibición será más fácil alcanzar nuestro objetivo final: una prohibición en toda la Unión Europea del uso de animales salvajes en circos.

Además de nuestro compromiso para acabar con el uso de animales salvajes en circos de toda Europa, también abogamos en contra del uso de animales salvajes en otras formas de entretenimiento, como en cine, televisión, anuncios o en redes sociales. Cundo ocurre pedimos a los canales de televisión que no utilicen animales salvajes o confrontamos a los famosos cuando se sacan selfies junto animales salvajes. También recordamos cada año la importancia de viajar de forma responsable con los animales y tratamos de concienciar sobre el sufrimiento que se esconde detrás de las atracciones turísticas con animales salvajes.

A nivel mundial el animal más traficado ilegalmente es el pangolín. En la última década se estima que 1 millón de pangolines han sido cazados furtivamente para el tráfico ilegal de sus escamas y otras partes de su cuerpo.

A nivel Europeo también ocurre tráfico de animales exóticos: macacos de Berbería, titíes de orejas blancas, tigres, caracales o pumas. Es muy difícil dar números exactos de animales vivos traficados ilegalmente ya que las bases de datos de cifras oficiales de incautaciones no siempre están completas o correctas, ya que es muy probable que no todos los animales traficados ilegalmente sean realmente localizados e incautados.

El macaco de Berbería, que está en peligro de extinción, fue durante años el mamífero exótico más confiscado en la Unión Europea y también la especie traficada ilegalmente que más frecuentemente llegaba a nuestros centros de rescate. Debido en parte al tráfico ilegal, el número de macacos de Berbería en la naturaleza disminuyó drásticamente  a menos de 10.000 individuos en tan solo 30 años, cuando en 1977 la estimación que había de la población era en trono a 23.000.

Afortunadamente, en 2016 se otorgó al macaco de Berbería el máximo estatus de protección dentro del convenio CITES, que regula el comercio internacional de especies animales y vegetales en peligro de extinción, gracias al trabajo de AAP junto con otras organizaciones. Desde entonces, hemos puesto en marcha el proyecto Born to be Wild para consolidar la aplicación de la ley contra el tráfico ilegal de estos animales y cuyo objetivo es salvar al macaco de Berbería de la extinción, mediante la contratación y capacitación de guardaparques en Marruecos; el trabajo con las autoridades y fuerzas del orden marroquíes, españolas e italianas para poner fin a la caza furtiva y reforzar la aplicación de la ley; el rescate de los animales confiscados; la concienciación de las generaciones futuras; y la implicación de agricultores y ganaderos locales para mitigar los problemas a los que se enfrentan en su convivencia con la especie.

La ley holandesa establece desde 1992 que solo las especies incluidas en la Lista Positiva pueden mantenerse como mascotas aunque la Lista Positiva real estaba pendiente de desarrollo. En 2015 entró en vigor la Lista Positiva de especies de mamíferos permitidos como animales de compañía por primera vez, pero en 2017 el Tribunal de Apelaciones de Comercio e Industria dictaminó que esta lista no se había creado de manera suficientemente independiente, transparente, verificable y experta. Por tanto, no era una lista que se pudiera utilizar. El problema no residía en la Lista Positiva como instrumento, que ya había sido declarado legalmente válido por el Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas, sino en la forma en que se había organizado el procedimiento de redacción.

El Ministerio de Agricultura, Naturaleza y Calidad Alimentaria trabaja desde 2017 en una nueva Lista Positiva de mamíferos susceptibles de ser tenidos como animales de compañía, según un procedimiento de realización completamente independiente y con un sistema de evaluación completamente nuevo. Este proceso se encuentra actualmente en la fase de finalización. Se espera que esta nueva Lista Positiva entre en vigor en 2022.

Las regulaciones sobre qué especies animales pueden comerciarse o tenerse como animales de compañía son muy diferentes entre los países de la UE. En España o Alemania un particular puede tener un tigre o un primate, en casi todas la comunidades autónomas, siempre que cumplan con las regulaciones pertinentes mientras que en Países Bajos está prohibido.

Los países de la UE con una regulación basada en Listas Positivas permiten solo aquellas especies que son seguras y aptas para ser tenidas como animales de compañía, lo cual es muy efectivo, eficiente y transparente. Pero la mayoría de los países de la UE todavía trabajan con listas negativas, que solo enumeran algunas especies prohibidas y permiten el comercio y tenencia de todos los demás animales. Estas listas difieren de un país a otro y solo funcionan de forma reactiva, no preventiva.

Cuando se trata de violaciones al bienestar animal, las autoridades policiales pueden proceder por la vía administrativa o penal. En la mayoría de los casos, se utiliza la vía administrativa, como pueden ser advertencias para subsanar errores, multas administrativas o la incautación del animal. También existe la posibilidad de que se apliquen sanciones penales como serían confiscar el animal de forma firme o que se imponga una prohibición sobre la tenencia de animales. Que se aplique una vía u otra depende de los hechos y circunstancias del caso y la decisión final del juez.

Cuando el delito es la posesión ilegal de un animal salvaje este también se puede procesar por la vía administrativa o penal e igualmente las medidas aplicadas dependerán de los hechos y circunstancias del caso y serán tomadas por las autoridades pertinentes. AAP no tiene influencia en estas decisiones , actuamos como socios de las autoridades dando solución al problema del destino del animal incautado al proporcionar refugio temporal a los animales incautados por las autoridades policiales.