AAP Participa en la presentación de la Oficina Central Nacional de Delitos Medioambientales de la Guardia Civil

AAP ha participado en la presentación de la Oficina Central Nacional de Análisis de Información sobre Actividades Ilícitas Medioambientales (OCN). 

Este nuevo departamento se crea dentro de la estructura de la Jefatura del SEPRONA y tiene como objetivo principal coordinar a nivel nacional la investigación de delitos ambientales y optimizar el potencial disponible para hacer frente a las amenazas contra la naturaleza. Se encargará también de unificar toda la información sobre la protección al medio ambiente, hasta ahora dispersa en diferentes cuerpos y administraciones y mejorar la coordinación de las instituciones que formamos parte del plan TIFIES (Plan de Acción Español ontra el Tráfico Ilegal y el Furtivismo Internacional de Especies Silvestres).

Durante la presentación de la OCN Marta Merchán, responsable de Políticas Públicas de AAP en España, tuvo la ocasión junto a FIEB, de hablar sobre los animales incautados procedentes del tráfico ilegal que acaban en nuestros centros de rescate, además de llamar la atención sobre las conexiones entre el tráfico legal e ilegal que se dan en las redes de tráfico.

En España cada año se decomisan 1500 animales procedentes del tráfico ilegal, un mercado que mueve anualmente 20.000 millones de euros y que utiliza las mismas vías que el tráfico de drogas o armas. 

Marta Merchán, responsable de Políticas Públicas de AAP y Cramen Aranda, directora del FIEB, durante la presentación de la OCN

El destino de muchos de estos animales es acabar como mascotas de capricho. Además, los animales traficados pueden ser una fuente potencial de enfermedades, afectando a la salud pública o la del medio ambiente. Potencialmente también pueden acabar como especies invasoras si se escapan o abandonan afectando así a especies autóctonas y a la conservación de la biodiversidad.

Por ello desde AAP abogamos por conseguir una regulación del comercio de especies basadas en Litados Positivos donde se recojan las especies adecuadas para ser animales de compañía, quedando fuera todas aquellas especies que no sean adecuadas para vivir en una casa, analizando de forma preventiva los riesgos de invasibilidad, salud pública, seguridad ambiental y bienestar antes de que un animal pueda ser comercializado como animal de compañía.

 

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